El fundador de Cardón exhortó a los empresarios a dejar sus ganancias en la Argentina para que el país crezca
El emprendedor Gabo Nazar, fundador de Cardón Cosas Nuestras, pidió a los empresarios argentinos dejar de ser “una máquina de sacar plata afuera” y los instó a terminar con “el círculo vicioso en el que dejamos a nuestros hijos adentro y sacamos el dinero del país”.
“Hoy tenemos la chance de que nuestros hijos no nos reclamen por qué dejamos pasar esta oportunidad, como yo sí se lo reclamé a mi padre. No estamos condenados al éxito, pero sí tenemos muchas chances de retomar una senda de crecimiento y de liderazgo a nivel global”, expresó Nazar, durante la segunda jornada del 47 Coloquio Anual de IDEA, en el marco de un panel sobre “oportunidades y desafíos” para los emprendedores de la región.
Nazar dijo que los empresarios argentinos tienen la “obligación” de ver el futuro con “optimismo”, y si bien remarcó que “ni en pedo” la Argentina está “blindada” ante la crisis financiera global, “sí estamos en mejores condiciones que nunca”.
“Debemos transformar esta crisis en oportunidad, por lo menos. Los vaivenes de la economía en la historia nos han hecho mal, pero también nos han preparado para llegar hasta acá. El momento es ahora: el futuro ya llegó. No sólo se puede ver el futuro con optimismo, los que estamos acá tenemos la obligación de verlo con optimismo. Sino seremos parte del problema y no parte de la solución. Si no podemos verlo con optimismo, mejor dejémosle el paso a otro”, dijo el empresario, que contó su experiencia como emprendedor exitoso.
En una autocrítica de la clase ejecutiva, Nazar dijo, además, que la costumbre de ahorrar en dólares y de sacarlos del país “es una cultura que los empresarios le han enseñado al ahorrista común, es algo que los empresarios le enseñaron a sus empleados”.
“No podemos seguir este círculo vicioso en el que dejamos a nuestros hijos adentro y sacamos la plata afuera. Decimos que en Estados Unidos hay ayuda a los empresarios, que en Brasil piensan en Reales, pero es porque tienen conciencia del rol social de los empresarios”, agregó.
Durante su exposición, Nazar contó la historia de Cardón Cosas Nuestras, una compañía que nació en su habitación de estudiante de veterinaria, cuando empezó a confeccionar accesorios por diversión y “despuntar el vicio”, y hoy engloba a más de un centenar de PYMES, entre locales con franquicias, y 20 talleres licenciados. Nazar destacó que la empresa ya cuenta con proyección internacional y presencias en desfiles en Nueva York, Chicago y Shangai: “Eso nos llena de orgullo”.
“Si nosotros, que somos un piojo con un bolsillo chiquito, podemos tomar estas oportunidades, qué no podrán hacer los grandes. Tenemos que animarnos más los empresarios argentinos”, agregó el emprendedor.
Gabo Nazar ironizó que su empresa “vive de un montón de gente que compra cosas que no necesita”, por lo cual la firma debe “emocionar y generar el deseo”.
“Después, como compañía, tenés que ayudar al cliente a racionalizar ese deseo, que lo lleva a comprar algo que no necesita y que además cuesta un montón de guita.
Porque necesitamos que compren nuestras camisas que valen 100 dólares y no la que vale 100 pesos, que es funcionalmente igual”, añadió el CEO de Cardón Cosas Nuestras.
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El emprendedor Gabo Nazar, fundador de Cardón Cosas Nuestras, pidió a los empresarios argentinos dejar de ser “una máquina de sacar plata afuera” y los instó a terminar con “el círculo vicioso en el que dejamos a nuestros hijos adentro y sacamos el dinero del país”.
“Hoy tenemos la chance de que nuestros hijos no nos reclamen por qué dejamos pasar esta oportunidad, como yo sí se lo reclamé a mi padre. No estamos condenados al éxito, pero sí tenemos muchas chances de retomar una senda de crecimiento y de liderazgo a nivel global”, expresó Nazar, durante la segunda jornada del 47 Coloquio Anual de IDEA, en el marco de un panel sobre “oportunidades y desafíos” para los emprendedores de la región.
Nazar dijo que los empresarios argentinos tienen la “obligación” de ver el futuro con “optimismo”, y si bien remarcó que “ni en pedo” la Argentina está “blindada” ante la crisis financiera global, “sí estamos en mejores condiciones que nunca”.
“Debemos transformar esta crisis en oportunidad, por lo menos. Los vaivenes de la economía en la historia nos han hecho mal, pero también nos han preparado para llegar hasta acá. El momento es ahora: el futuro ya llegó. No sólo se puede ver el futuro con optimismo, los que estamos acá tenemos la obligación de verlo con optimismo. Sino seremos parte del problema y no parte de la solución. Si no podemos verlo con optimismo, mejor dejémosle el paso a otro”, dijo el empresario, que contó su experiencia como emprendedor exitoso.
En una autocrítica de la clase ejecutiva, Nazar dijo, además, que la costumbre de ahorrar en dólares y de sacarlos del país “es una cultura que los empresarios le han enseñado al ahorrista común, es algo que los empresarios le enseñaron a sus empleados”.
“No podemos seguir este círculo vicioso en el que dejamos a nuestros hijos adentro y sacamos la plata afuera. Decimos que en Estados Unidos hay ayuda a los empresarios, que en Brasil piensan en Reales, pero es porque tienen conciencia del rol social de los empresarios”, agregó.
Durante su exposición, Nazar contó la historia de Cardón Cosas Nuestras, una compañía que nació en su habitación de estudiante de veterinaria, cuando empezó a confeccionar accesorios por diversión y “despuntar el vicio”, y hoy engloba a más de un centenar de PYMES, entre locales con franquicias, y 20 talleres licenciados. Nazar destacó que la empresa ya cuenta con proyección internacional y presencias en desfiles en Nueva York, Chicago y Shangai: “Eso nos llena de orgullo”.
“Si nosotros, que somos un piojo con un bolsillo chiquito, podemos tomar estas oportunidades, qué no podrán hacer los grandes. Tenemos que animarnos más los empresarios argentinos”, agregó el emprendedor.
Gabo Nazar ironizó que su empresa “vive de un montón de gente que compra cosas que no necesita”, por lo cual la firma debe “emocionar y generar el deseo”.
“Después, como compañía, tenés que ayudar al cliente a racionalizar ese deseo, que lo lleva a comprar algo que no necesita y que además cuesta un montón de guita.
Porque necesitamos que compren nuestras camisas que valen 100 dólares y no la que vale 100 pesos, que es funcionalmente igual”, añadió el CEO de Cardón Cosas Nuestras.
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